Según el nuevo Informe Mundial de Situación sobre Alcohol y Salud 2014 [Global status report on alcohol and health 2014], publicado por la Organización Mundial de la Salud (OMS), en 2012 se produjeron 3,3 millones de defunciones en el mundo provocadas por el uso nocivo del alcohol.
El consumo de alcohol no sólo puede causar dependencia, sino que también aumenta el riesgo de que las personas padezcan más de 200 enfermedades, entre ellas cirrosis hepática y diversos cánceres. Además, el consumo nocivo de alcohol puede relacionarse con la violencia y los traumatismos.